Lakarri es una cima que divisamos desde Pamplona desde múltiples lugares, siempre que miramos hacia el este. Cierra la Cuenca sobre las estribaciones que separan los valles de Arriasgoiti (río Erro) y Esteribar.
Accesible desde Elía, un recoleto lugar del valle de
Egüés, hay que tener en cuenta que no podemos atacarlo de frente, pues la intrincada vegetación que lo rodea provoca más de un susto y disgusto a quien lo intenta.
El camino se desvía a la derecha y, tras alcanzar algún collado que nos permita circular cerca de la cresta, pero por las laderas que dan hacia la carretera del valle de Erro, hemos de subir por una amplia pista que nos lleva casi hasta la cima, en un collado del que nos desviaremos por senda a la izquierda, ya en la cresta cimera.
Aquí describiremos el itinerario que visita el despoblado de Amokain, de reminiscencias legendarias (cuyas ruinas se muestran en la imagen de portada), por una pista ascendente, aunque para quien le parezca más atractivo, hay otro, algo más adelante, descrito por Javier Zubieta (y recomendado tras épocas lluviosas) que también sube a la derecha, por una senda entre el monte bajo y se incorpora a su vez a la pista antes descrita.
Excursión mañanera, sencilla, que también puede completarse en plan travesía bajando después hacia el alto de Errea, al otro lado (si disponemos de vehículos que nos esperen). Este itinerario se describe en la
ruta 9086, que ataca esta misma cima desde dicho punto.