La vía verde «Bidasoako Trenbidea Zaharra» o del
«Tren del Bidasoa» corresponde al antiguo trazado de este ferrocarril que unía Baztan con Irún.
Entre
Doneztebe y
Elizondo no se ha recuperado (por el momento) el recorrido, pues parte del mismo se ha convertido en terrenos privados.
Sin embargo, desde Doneztebe a Endarlatza (límite de la Comunidad), una estrecha, llana y tranquila cinta de asfalto ha sustituido los antiguos raíles del tren por un itinerario que, junto a la ribera izquierda del Bidasoa, permite recorrer a pie o en bicicleta, los verdes paisajes de esta regata.
Una sucesión de prados, laderas boscosas, caseríos diseminados, riberas del Bidasoa y algún que otro túnel (acondicionado para el paso con luz, etc.), nos permiten plácidos paseos por el mismo.
En esta ruta tenemos en cuenta esto para describir dos partes muy diferentes: la primera corresponde a un tramo de esta vía verde, el que une la entrada de la carretera a
Igantzi con la ermita de Salbatore (en la carretera Lesaka-Oiartzun).
Este primer tramo posee las características que hemos descrito para la Vía Verde. Podemos considerar, además que esta primera mitad es perfectamente accesible para discapacidades.
La segunda parte es completamente diferente. Para quien no desee afrontarla hay una alternativa lógica (desandar lo andado para volver al inicio).
Para quien quiera volver por una ladera montañosa, con un desnivel de unos 250 m, y pisando una combinación de sendas y pistas muy interesante (y que exige un cierto sentido de orientación), le recomendamos el regreso por lo que describimos como segunda parte.
Existe además una dificultad añadida (no excesiva, pero conviene conocerla), en los 300-400 metros de senda invadida y obstaculizada por los troncos de los pinos tirados en medio del recorrido sin el más mínimo cuidado. El estado de este tramo, por lo que se ve, y por lo que nos contaba Josetxo (el amable caminante lesakarra, suponemos que del caserío Euran, que nos encontramos en el monte), este desaguisado ya dura un cierto tiempo. Y como la senda no se utiliza apenas...
En este tramo disfrutamos de excelentes vistas sobre
Lesaka, Igantziko Bentak, la regata del Bidasoa y los montes circundantes.
Cabría incluso una tercera opción, que sería la de, en caso de considerar que la senda oponía demasiados obstáculos, descender ladera abajo hasta alcanzar de nuevo el camino de abajo (el de ida), a la altura del túnel de Onbordi.