"Recorrido"

Datos geográficos
Lugar de origen :

Ayuntamiento de Pamplona (foto superior),
Cartografía Hoja 141(1-6) 6 – 1 del Gobierno de Navarra Escala 1:500, se pueden usar muchas guías y planos, incluso consultar a los “nativos” normalmente simpáticos y colaboradores.

Destino final:

Catedral de Pamplona Siglo XV

Coordenadas al centro del crucero

UTM X:6611.200 Y:4741.903

Zona 30, traducido a longitud y latitud 1º 38´23.066”W y 42º 49´15.052” N

El eje longitudinal del crucero tiene una inclinación respecto al este geográfico de 26,995º

Esperemos que con esta información no se pierda nadie y pueda llegar sin grandes riesgos a visitar a Sta. María la Real madre de Dios y madre nuestra como nos enseñó el Astete.


Dada la dificultad de esta ruta vamos a pergeñarla de forma exhaustiva, tratando de evitar despistes por los numerosos establecimientos, hosteleros, pasteleros, comerciales ...........etc. y sus consiguientes peligros.
En la zona del Ayuntamiento peligros: Nativos y guiris.

Cruce Mercaderes, Chapitela: (25 m.). Peligros: Nativos y guiris.

Cruce Estafeta: (105 m.). Peligros: Ligera pendiente descendiente.

Cruce Calderería, Mañueta, Navarrería y Curia. Antigua Sta. Cecilia: (155 m.). Peligros: Tráfico, camellos y manguis.

Cruce Dormitalería( Curia): (255 m.) (desnivel 448 m.). Peligros: ¡¡Curia 6,2% y ¡¡¡Moscovitas.

Atrio (Puerta Cat.): (295 m.) (desnivel 450 m.). Peligros: Llano, charcos

Pila Benditera: (305 m.) (desnivel 451 m.). Peligros: 3 escaleras sin protección, ¡¡¡ Frío

Total: 305 m. y 7,20 m. de desnivel.


Nota:

Camino (Aceras) en malas condiciones por falta de interés del Ayuntamiento, tráfico peligroso, pendientes fuertes 6,2% ¡¡¡¡ resbaladizas en caso de lluvias, hielos etc.
Caídas frecuentes
Se pueden utilizar rutas alternativas por la Navarrería y Dormitalería con menos pendiente pero con fauna mas peligrosa, drogatas, manguis ..........
Se recomienda ir en grupo jubiloso y dicharachero ...... procurar no criticar al ausente.

Foto superior: Calle Curia, con la Catedral al fondo.

Catedral

Suelo liso y llano de losas de piedra bien cuidado..........ambiente sombrío y fresco en verano pero frío en invierno (abrigarse ) pese al cuidado de los esclavos ..................
ah ¡ pero creías que hoy día no hay esclavos ??????
Esclavo, además de la acepción social y guerrera, es la persona sujeta a deber, pasión, afecto ...... en este caso de Sta. María, ya os contaremos mas adelante lo que hacemos, ahora estamos en la descripción física de la Ruta del Esclavo.

El rutero se incorpora al Rosario (7:30 p.m.) y en el V Misterio recorre la Catedral dando dos vueltas aprox.. cantando y portando faroles, estandartes recitando letanías etc.
1ª Vuelta

Parte de la Capilla de San José sentido levógiro Estandartes al viento, faroles encendidos y filas apretadas de fieles respondiendo las Avemarías que desgrana el coro de varones ..........Se para en la encrucijada del órgano con el altar mayor.

Distancia 122 mts

2º Vuelta

Al oír la letanía St. María se pone en marcha de nuevo la comitiva y en el mismo sentido levógiro recorre la nave Central volviendo a la posición de formación de faroles y estandartes.

Distancia 106 mts


Resumen Recorrido diario

Aproximación Catedral, 305 m.

1ª Vuelta,122 m.

2º Vuelta,106 m.

Retorno Ayuntamiento.305 m.

Total día 838 m.


Resumen Anual

Como sabéis esta es una ruta de fondo resistencia y persistencia, muchos de los participantes la hacen a diario viniendo hasta de lugares exóticos .......
( Chantrea, San Juan .......) algun@s hacen la “goma” para no perder el estandarte.

Anualmente un participante recorre mas de 300 Km. ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ y asciende a montes como el Perdido ¡¡¡¡¡¡¡

No os extrañe la salud y longevidad de estos hombres y mujeres llevando una vida tan sana .... ora et camina.

Si además se portan faroles, de hasta 35 Kg. con 3 m. de alto (menuda inestabilidad) comprenderéis que una buena preparación física es conveniente para la realización de esta ruta llevada a su máxima realización.


Foto: En el 3D superior podemos ver la Catedral de Pamplona.

"Historia de los Esclavos de Santa María la Real"

El Rosario de los Esclavos de Santa María en la Catedral data del primer tercio del Siglo XVII. Y con su modo peculiar de entonces viene celebrándose hasta ahora contra todos los avatares vicisitudes del tiempo.

Siempre será meritoria una perseverante devoción en día o época determinada del año; pero cuando la práctica es diaria y ha sabido mantenerse a lo largo de más de tres centurias, se convierte en admirable.
Al tesón y a la fe profunda de nuestro pueblo debemos pues, el milagro de esta devoción mariana, que ofrece hoy tan hondo y característico sabor de tradición.

En la foto superior el altar de la Catedral con la imagen de Santa María la Real y delante del mismo el sepulcro de Carlos II y su Esposa Doña Leonor de Trastamara.

El Rosario de los Esclavos de Santa María en la Catedral data del primer tercio del Siglo XVII. Y con su modo peculiar de entonces viene celebrándose hasta ahora contra todos los avatares vicisitudes del tiempo.

Siempre será meritoria una perseverante devoción en día o época determinada del año; pero cuando la práctica es diaria y ha sabido mantenerse a lo largo de más de tres centurias, se convierte en admirable.
Al tesón y a la fe profunda de nuestro pueblo debemos pues, el milagro de esta devoción mariana, que ofrece hoy tan hondo y característico sabor de tradición.

En la foto superior el altar de la Catedral con la imagen de Santa María la Real y delante del mismo el sepulcro de Carlos II y su Esposa Doña Leonor de Trastamara.

A principios del Siglo XVII, por la predicación de los Dominicos se popularizaron en todo el ámbito regional los rosarios públicos procesionales los cuales tuvieron gran arraigo en la católica Pamplona, lo que animó al Obispo de esta Don Melchor Ángel Gutiérrez a instituir el ROSARIO DE LOS ESCLAVOS DE MARIA, a semejanza del fundado por el Beato Simón de Rojas en el Convento de Trinitarios Calzados de Madrid.

Este esclarecido prelado (dice Arigita en sus escritos que obran en el archivo de la Catedral) “murió el 9 de diciembre de 1634 dejando gratísimo recuerdo de sus excelentes virtudes y de su devoción ferviente a la Santísima Virgen SANTA MARIA DE PAMPLONA y fue sepultado por disposición propia al pie de la imagen de NUESTRA SEÑORA DE LAS BUENAS NUEVAS, frente a la puerta de entrada al claustro”.

Foto: Coro de los Esclavos de Santa María cantando a lo largo del la celebración del Rosario.

Así, públicamente, vino rezándose el Rosario de los Esclavos durante más de siglo y medio, hasta que las ideas liberales que invadieron España motivaron su decadencia.

Y es el veinte de abril de 1797, cuando un grupo de beneméritos pamploneses se reúne para dar cuenta de que desde tiempo inmemorial se venía celebrando el Rosario de los Esclavos en la Santa Iglesia Catedral, saliendo diariamente según costumbre al toque del Ángelus. “Que hubo momentos de tan poca concurrencia que se creyó desaparecería tan santa costumbre y que milagrosamente conservó; pero para no exponer a una probable extinción convenía redactar unas constituciones”.

Fotos superior: Los faroles rindiendo honor a nuestra Virgen Santa María.

Las constituciones se redactaron con el consentimiento y licencia del M. I. Cabildo Catedral y fueron aprobadas por el Señor Ordinario Eclesiástico y por el Real y Supremo Consejo del Reino.

El libro que con este motivo se editó en la imprenta de Don Joaquín de Domingo empieza así:

“En la ciudad de Pamplona a primero de octubre de mil setecientos noventa y siete, día del Santísimo Rosario de la Reina de los Ángeles Maria, Señora nuestra, habiendo precedido la venia del Ilustrísimo Señor Don Lorenzo Igual de Soria, Obispo de esta Diócesis, se juntaron las personas que se constarán abajo por sus firmas y otras muchas que por no saber escribir y por evitar prolijidad no se expresan aquí, con el objeto de aumentar y perpetuar la devoción del Santísimo Rosario que diariamente sale de la Santa Iglesia Catedral a mayor honra y gloria de Dios nuestro Señor, culto de la Virgen y utilidad de los fieles. Y conviniendo a este fin erigir con la correspondiente aprobación una Congregación y dar a ésta las reglas y constituciones con que se gobierne, ha merecido hacerse en la forma siguiente ........... >>>

Foto: Panorámica en 3D del Altar de la Catedral de Pamplona. Santa María la Real detrás del Altar

Fundada la Congregación, quedó bajo la advocación de Nuestra Señora del Sagrario e incorporada a la antiquísima Cofradía del Santo Rosario de Santo Domingo de la ciudad. Y para su conexión con el Cabildo Catedral, éste quedaría representado en aquella por uno de sus canónigos con el título de Protector y por el Vicario de la Parroquia de San Juan Bautista.

Foto: Altar de la Catedral de Pamplona.

Actualmente dirigen el rosario desde el Altar mayor los congregantes D. José María Azparren y D. Fernando Aldaz con prontitud y devoción.

Así pues, el Rosario de los Esclavos de Maria tiene hoy (año 2003) una existencia de 369 años y 206 como Congregación canónicamente constituida.

En acción de gracias por su fundación se celebró por la mañana una brillantísima función en Santo Domingo, y a las tres y media de la tarde, con la música de la Capilla, se rezó en la catedral un solemne rosario “previo anuncio por las campanas grandes entre ellas la llamada “Maria”, y fue tan grande la concurrencia que la Catedral resultó insuficiente”. Por gracia especialísima se descubrió a los fieles la imagen de Santa Maria, (hay que tener en cuenta que en aquellos tiempos, el camerín de la Virgen estaba tapado por una cortinilla, y solo en ocasiones muy solemnes podían los fieles contemplar la imagen de Santa Maria).

Foto: Imagen de Santa María la Real en el altar de la Catedral de Pamplona.

Así pues, el Rosario de los Esclavos de Maria tiene hoy (año 2003) una existencia de 369 años y 206 como Congregación canónicamente constituida.

En acción de gracias por su fundación se celebró por la mañana una brillantísima función en Santo Domingo, y a las tres y media de la tarde, con la música de la Capilla, se rezó en la catedral un solemne rosario “previo anuncio por las campanas grandes entre ellas la llamada “Maria”, y fue tan grande la concurrencia que la Catedral resultó insuficiente”. Por gracia especialísima se descubrió a los fieles la imagen de Santa Maria, (hay que tener en cuenta que en aquellos tiempos, el camerín de la Virgen estaba tapado por una cortinilla, y solo en ocasiones muy solemnes podían los fieles contemplar la imagen de Santa Maria).

Foto: Imagen de Santa María la Real en el altar de la Catedral de Pamplona.

El Rosario, entonces, salía a la calle todos los días del año, entre las cinco y seis y media de la madrugada, según las estaciones y con gran solemnidad en las festividades de Jesús y Maria, regresando a la Catedral, donde se terminaba con misa rezada ante una imagen de la Virgen en el altar de San Gregorio. Cuando el tiempo lo impedía, los rezos se hacían en el interior del templo.

Foto: Participantes del Rosario rezando y paseando a lo largo de la Catedral a la luz de los faroles.

La víspera de la Virgen del Rosario, la procesión terminaba en Santo Domingo, donde se cantaba el resto del Rosario ante la imagen de la Virgen del Sagrario de la Hospitalería. El recorrido era al parecer, por las calles de Navarrería, Carmen y Cuesta del Palacio.

Los Rosarios solemnes eran entonces frecuentes. Así en 1799, con motivo del fallecimiento del Papa Pío VI y como rogativa para la acertada designación de la Sede vacante, el Rosario salió durante nueve días seguidos y después durante tres más “con música y majestad” como acción de gracias por la feliz elección del sucesor, que fue Pío VII.

Se repiten después estas solemnes rogativas del Rosario, en 1800 durante nueve días, para implorar del Cielo “cese y no se extienda la epidemia que viene asolando las ciudades y comarcas de toda Andalucía”.

Y el 4 de octubre de 1804, la procesión se dirigió al Convento del Carmen Calzado, a fin de pedir a Dios “aplaque los males de peste y terremoto en los pueblos meridionales de España”.

Hay un expresivo silencia de veintiún años en el libro de actas, que por los recuerdos que suscita no puede menos de mencionarse. Es el momento de la guerra de la Independencia, de tan abnegada y heroica participación del pueblo navarro, y de los turbulentos tiempos que le sucedieron. Durante este periodo no se extendió acta alguna, hasta 1827, en la que leemos “que por causa de las ocurrencias políticas de los últimos años, falta y ausencia de algunos elementos de la Junta” ésta no pudo reunirse. Aunque parece deducirse que, no obstante las ocurrencias, el Rosario se celebró como de costumbre.

Y así llegamos al año 1879 en que, terminado el bloqueo de Pamplona por los carlistas, los rectores del Rosario juzgaron conveniente recluirlo de modo definitivo en el interior del Templo Catedralicio. Y años después, antes de finalizado el siglo, se acordó también que su rezo tuviera lugar por la tarde, conforme viene haciéndose actualmente.

Foto: La cabecera del Rosario encabezada por el estandarte de la Inmaculada realizado por el pintor Pamplonés Luis Araujo en el año 2000, acercándose al coro de los Esclavos de María.

Hasta esa fecha el Rosario ocupó lugar principalísimo en la vida devota y recoleta de la ciudad y fue siempre objeto de especial atención por parte de Arzobispos y Obispos, que lo enriquecieron con un inmenso tesoro de indulgencias. Pues, aparte de las plenarias por señalados motivos, se cuentan por millares las que diariamente pueden ganarse: por la asistencia al mismo, por cada uno de los Padrenuestros y Avemarías, por el canto de las letanías, por la Salve, por todos y cada uno de los pasos dados en la procesión y hasta por llevar el estandarte o sus borlas.

El Rosario de hoy apenas difiere de los tradicionales. Por especial favor del Cielo, nunca faltaron, a lo largo del tiempo, dignos continuadores de aquellos denonados caballeros de la Virgen consagrados a la diaria tarea de su organización, respetando con laudable buen sentido la integridad de su ritual.

Foto: Cola del Rosario, con el Estandarte de Santa María la Real.

Para gran parte de los casi 400 congregantes sigue vigente la cuota mínima anual de 3 €. La procesión, con los faroles que antes iluminaban la ruta oscura de la madrugada, es fiel trasunto de aquellas procesiones públicas. Como entonces, tiempo de peregrinos y aventureros por caminos llenos de peligros y mares tenebrosos, continúa rogándose:

“por los caminantes y navegantes”

Y se cantan al comienzo de cada misterio unas letrillas cuya música y forma poética no desmienten su antigüedad:


“Vuestro amparo buscan

benigno y suave

hoy los desterrados

en aqueste valle”.


“Tú dulce Jesús

que es fruto admirable

de tu puro vientre

muéstranosle afable”.


Foto: El Rosario Rezando pasa por la nave lateral por detrás del Sepulcro de Carlos III. Pocas personas jóvenes se acercan actualmente a esta tradición, como la chica de la foto de la derecha.

Tan sólo en el canto del quinto misterio y la letanía puede señalarse una variación, pues antes se hacía procesionalmente y con instrumentos musicales, muchos recordarán la estampa velazqueña del bondadoso D. Valentín Fernández, el último músico romántico del Rosario y las floritura de su “fagot”, del que era maestro consumado. A su desaparición en 1949 y a falta de otros voluntarios, se recurrió al armónium, que imposibilita el cortejo de los cantores en la procesión.

Fuera , pues, de este detalle, su estructura y peculiaridad son las mismas, pudiéndose asegurar que el Rosario actual es, no una reminiscencia, sino la continuación de aquellos seculares.

Foto: Final del Rosario de nuevo vuelven los faroroles a adorar a Santa María la Real.

Su repertorio de Avemarías es muy numeroso y de muy variado estilo. Serias, alegres y hasta con aire de villancico. Para todas las circunstancias. La casi totalidad de las que hoy se cantan tienen entre los sesenta y ciento cincuenta años de existencia. De autores muy diversos. Y es que antes eran pocos los músicos locales que no dejaban una lírica dedicación de este género al Rosario.

De entre todos ellos destacan los nombres de D. Mariano García y D. Daniel Piudo, eminentes Maestros de capilla que fueron de esta Catedral, que legaron muestra elocuente de su inspiración y talento.

Naturalmente, estas Avemarías quedan hoy fuera de lo litúrgico, pero es que en el Rosario de los Esclavos todo tiene el encanto de lo tradicional.

Foto: Coro de la Catedral de Pamplona

Los cantores se reclutan entre los hombres asiduos al Rosario, y su organización, como de costumbre, corre a cargo de elementos de la Junta.

La Congregación nunca tuvo dificultades económicas. Como sus gastos no son grandes y la colaboración es desinteresada con las cuotas de los Congregantes, los recogido en la bandeja y algunos donativos cubre sus necesidades anuales y todavía queda para algo para destinarlo a alguna obra caritativa, cumpliendo así con lo instituido por los fundadores.

No puede expresarse igual optimismo al tratar de la asistencia. A partir del presente siglo y contrariamente al crecimiento de la población, la concurrencia ha venido reduciéndose, limitándose hoy a un grupo de adeptos de toda edad y condición social; gente piadosa y de fina sensibilidad que, al cumplir con su devoción, gusta asimismo de evocar el pasado y de ser continuadora de una costumbre que en modo alguno debiera desparecer.

Pero la devoción, diluida en la profusión de parroquias y conventos, las funciones radiadas y las misas vespertinas a la misma hora, han relegado a este tradicional Rosario hasta el punto de que entre los asiduos al rezo solemne del mes de octubre no escasean quienes desconocen que su práctica es diaria.

Foto: Estandarte realizado por el pintor navarro Luis Araujo en el año 2000. Motivo: Santa María la Real.

Los cantores se reclutan entre los hombres asiduos al Rosario, y su organización, como de costumbre, corre a cargo de elementos de la Junta.

La Congregación nunca tuvo dificultades económicas. Como sus gastos no son grandes y la colaboración es desinteresada con las cuotas de los Congregantes, los recogido en la bandeja y algunos donativos cubre sus necesidades anuales y todavía queda para algo para destinarlo a alguna obra caritativa, cumpliendo así con lo instituido por los fundadores.

No puede expresarse igual optimismo al tratar de la asistencia. A partir del presente siglo y contrariamente al crecimiento de la población, la concurrencia ha venido reduciéndose, limitándose hoy a un grupo de adeptos de toda edad y condición social; gente piadosa y de fina sensibilidad que, al cumplir con su devoción, gusta asimismo de evocar el pasado y de ser continuadora de una costumbre que en modo alguno debiera desparecer.

Pero la devoción, diluida en la profusión de parroquias y conventos, las funciones radiadas y las misas vespertinas a la misma hora, han relegado a este tradicional Rosario hasta el punto de que entre los asiduos al rezo solemne del mes de octubre no escasean quienes desconocen que su práctica es diaria.

Foto: Estandarte realizado por el pintor navarro Luis Araujo en el año 2000. Motivo: Santa María la Real.

Y es una pena, porque el Rosario ordinario del año, por su misma intimidad, ofrece todavía más bellos aspectos. El Rosario habitual es apacible, cordial y de una hogareña espiritualidad. Con sus faroles y estandartes y las filas de hombre y mujeres bajo las naves en penumbra, salmodiando el principio de la letanía con aquella humilde naturalidad, tiene, para el que sepa verlo, no el aire penitente que pudiera creerse, sino la emoción y la gracia ingenua de los Nacimientos. Momento que forzosamente ha de ser grato a la Virgen, que desde su trono parece tener una sonrisa hasta para las disonancias de los niños.

Así es hoy el Rosario que nos legaron nuestros mayores: joya impar de tradición y belleza.

Engrosemos, pues, las listas de congregantes y frecuentemos este Rosario de los Esclavos tan indulgenciado y tan entrañablemente nuestro,. Seamos eslabones de esa cadena multisecular que enlace nuestro fervor con el de nuestros hijos ....

Por que , además de cumplir con la devoción que debemos a la Madre de Dios y Madre nuestra, medianera de todas las gracias, es también para un navarro honor de caballero postrarse a los pies de esta imagen tan venerada de SANTA MARIA en el mismo lugar donde tantas veces lo hicieron y velaron sus armas los monarcas de nuestro reino.

Foto: Estandarte realizado por el pintor navarro Luis Araujo en el año 2000. Motivo: La Inmaculada

Y es una pena, porque el Rosario ordinario del año, por su misma intimidad, ofrece todavía más bellos aspectos. El Rosario habitual es apacible, cordial y de una hogareña espiritualidad. Con sus faroles y estandartes y las filas de hombre y mujeres bajo las naves en penumbra, salmodiando el principio de la letanía con aquella humilde naturalidad, tiene, para el que sepa verlo, no el aire penitente que pudiera creerse, sino la emoción y la gracia ingenua de los Nacimientos. Momento que forzosamente ha de ser grato a la Virgen, que desde su trono parece tener una sonrisa hasta para las disonancias de los niños.

Así es hoy el Rosario que nos legaron nuestros mayores: joya impar de tradición y belleza.

Engrosemos, pues, las listas de congregantes y frecuentemos este Rosario de los Esclavos tan indulgenciado y tan entrañablemente nuestro,. Seamos eslabones de esa cadena multisecular que enlace nuestro fervor con el de nuestros hijos ....

Por que , además de cumplir con la devoción que debemos a la Madre de Dios y Madre nuestra, medianera de todas las gracias, es también para un navarro honor de caballero postrarse a los pies de esta imagen tan venerada de SANTA MARIA en el mismo lugar donde tantas veces lo hicieron y velaron sus armas los monarcas de nuestro reino.

Foto: Estandarte realizado por el pintor navarro Luis Araujo en el año 2000. Motivo: La Inmaculada

"La Capilla de Música"

Es probablemente la parte mas rica culturalmente hablando del Rosario, en tiempos de esplendor llegó a contar con músicos profesionales tanto de canto como instrumentistas, trompas, oboes, fagots, etc

Que maravilla y que efecto causarían en tan simpar marco, la Seo de Pamplona

Hoy día el Coro después de años difíciles parece consolidado y está compuesto por una docena de hombres que a diario amenizan el Rosario dándole un carácter de solemnidad
haciéndolo mas atractivo y ameno rompiendo la monotonía de la salmodia.

Nos dirige habitualmente D. Miguel Angel Belzunce ayudado al armoniun por D. Juan José Echamendi.
También colaboran en tareas de dirección e instrumentos D. Jesús Mª Teruel, D Javier Belzunce como directores.

D. Pablo Jiménez y Don Julian Ayesa al armoniun y Don Miguel Angel Larrañeta a la campana

De su calidad dan fé los asistentes y la Virgen, que siempre nos sonríe, (esto dice Cruz Mª) aunque no todas las veces estemos a la altura de los que nos precedieron.

Queremos resaltar la calidad y bonhomía de nuestro bajo internacional Don Jesús Aranguren, ¡¡como nos emociona cuando ataca en solitario

.......Dios te salve.........Salve María ........ llena eres ...........eres de gracia ¡¡¡¡¡¡¡¡ inenarrable¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡

Si un día tenéis la suerte de oírle VOLVERÉIS.

El fondo de música es riquísimo, muchos maestros de la Catedral donaron al Rosario ron Ave Marías bellísimas, mas de 70 se guardan en nuestros archivos y docenas vivas en nuestro repertorio, ver el libro de D. Jesús Arraiza para una visión completa de nuestros fondos.

"Cuarto de los Faroles"

De la época de esplendor, del Rosario de los Esclavos, nos quedan detalles muy diversos y ricos especialmente pinturas, faroles y fondos musicales amen de la cultura relacionada con un entorno referente al culto.
También celebramos conciertos y promocionamos libros cuando la ocasión lo merece.
Siempre el Rosario ha contado con Maestros pintores de reconocido prestigio que han plasmado sus ideas en los estandartes que guían a los congregantes en las manifestaciones diarias y en las especiales.
Los de uso diario son datables del Siglo XVIII de gran valor artístico y sentimental, son nuestros desde ....
Los de uso especial (grandes solemnidades) fueron en 1927 pintados y donados por Don Javier Ciga Echamendi (secretario de la congregación muchos años) pintor de la Navarrería de gran fama aún hasta nuestros días
Los hemos tenido que retirar a unas vitrinas donde se pueden contemplar protegidos de un deterioro ya evidente.

Don Luis Araujo Martínez pintor pamplonés de gran prestigio y oficio, congregante y cantor del coro ha reemplazado los deteriorados estandartes con otros de su imaginación donando la pintura y siguiendo una tradición ya establecida que esperemos sea mantenida en el devenir de los tiempos.
Las hermanas Navarro de la Pza. del Ayuntamiento confeccionaron y bordaron con esmero los estandartes haciendo donación de ellos a la congregación.

Tal vez tan característico del rosario sean los estandartes como los faroles, ambos se complementan para dar realce a la función sobre todo en el mes de Octubre cuando solemnemente recorren las naves acompañados del pueblo mientras cantan las letrillas tradicionales .

El conjunto de faroles 15 pequeños 2 grandes y 2 gigantes diseñados por D. Javier Ciga en el Año 1927 pueden disfrutarse en el mes de Octubre y en las grandes fiestas de la Virgen .

También a modo de museo en el “cuartico” de faroles, lugar de reunión de los esclavos donde estaremos muy felices de recibiros.
Fueron construidos en Zaragoza tierra de faroleros rosarieros y de la Pilarica ¡¡¡¡


Foto: Panorámica 3D del cuarto de los faroles en la Catedral de Pamplona.

"Resumen y despedida"

Como se puede colegir de todo lo hasta ahora expuesto somos una congregación de Esclavos para dar Culto a Sta. María la Real madre de Dios y madre nuestra de la forma mas digna posible, de ahí el interés y los medios que ponemos para conseguirlo.

Querido rutero, rutera, que me estas leyendo te invito a que vengas y hagas esta “ruta” tan llena de “peligros” disfrutes de sus fondos culturales y saludes a la Virgen en la forma que te hayan enseñado.

Ella te lo agradecerá y te llenará de paz.
Ya se que tienes muchas cosas que hacer y que el viento te sopla de cara en la vida, la salud la familia el trabajo van bien y te parece que eres invencible y pasas de estas antiguallas, no importa Ella te espera te vaya bien ó mal.

Un día el viento rolará y de popa pasará a proa y ese día (que no ocurra) posiblemente te sentirás solo, traicionado y triste, le pasó a Cristo su hijo .....…

Ella estará muy feliz escuchándote, consolándote y ayudándote y nosotros sus Esclavos si podemos también.

Te esperamos en el “cuartico” de la derecha según se entra a la Catedral, antigua Sacristía de Sta. Catalina

A las 7:30 p.m. cuando quieras.

A veces hay pastas y vino de la tierra .....…

No es este el lugar para extenderse en pormenores exhaustivos si queréis profundizar en nuestra historia, os recomendamos el libro “Los Esclavos de la Catedral” del llorado canónigo de la Navarrería, Don Jesús Arraiza Frauca (q.e.p.d.) editado por el Ayuntamiento de Pamplona en la colección Temas Pamploneses coincidiendo con el 200 aniversario de la fundación de nuestra Congregación.
Foto: Esclavos de Santa María, en su cuarto, y en el coro, años 2001 y 2003.